lunes, 30 de enero de 2012

Fregogym

Relacionado con la higiene postural y ergonomía de las tareas domésticas está el "Fregogym", que realmente no es algo nuevo, sino una iniciativa de la empresa de productos del hogar Rayen que, en colaboración con un doctor y un entrenador físico, ha desarrollado una tabla de ejercicios que ayuda a adelgazar mientras se realizan las tareas domésticas. Así, por ejemplo, planchar durante una hora elimina 145 calorías y limpiar cristales, 150. Os pongo la tabla que editaron en su día porque ya no está disponible en su página web.



1. Cuando limpies los cristales o el polvo de las zonas altas, levanta los talones y bájalos sin llegar a tocar el suelo. De esta forma trabajarás los gemelos.


2. Mientras limpias las baldosas de la cocina o del baño, flexiona las rodillas como si estuvieses sentado en una silla y así trabajarás cuádriceps y glúteos.



3. Cuando planches, es importante hacerlo siempre con un pie apoyado sobre un escalón para evitar dolores de espalda. Ir alternando con la otra pierna.



4. Cuando cojas un cubo lleno de agua, flexiona las rodillas manteniendo la espalda bien recta. Evitarás dolores de espalda a la vez que tonificarás el cuádriceps.



5. Para transportar un cubo lleno de agua, eleva el brazo hasta formar un ángulo de 45º, y así trabajarás bíceps y antebrazo.



6. Hombros: eleva el brazo con un cubo vacío o con poca agua hasta formar un ángulo de 90º. Para no perder el equilibrio, te puedes apoyar en el palo de la fregona con la otra mano





7. Dorsales: utilizando una fregona como punto de apoyo, separa las piernas y dobla el cuerpo hacia adelante manteniendo la espalda bien recta hasta formar un ángulo de 90º.



8.Abductorse: utilizando el palo de una fregona como soporte para no perder el equilibrio, separa las piernas y flexiona la derecha a la vez que deslizas la izquierda hacia el lado. Repetir el ejercicio con la otra pierna.



9. Glúteos: utilizando nuevamente el palo de la fregona como punto de equilibrio, separa las piernas y flexiona las dos rodillas a la vez, manteniendo la espalda bien recta.


¿A qué no parece mala idea?

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